Pese a la buena disposición mostrada por la concejala de medio ambiente en la reunión mantenida el pasado mes de octubre, en la que se comprometió a contar con la participación ciudadana en la conservación y gestión del arbolado urbano, en las calles de Santander se ha podado y se sigue podando de forma brutal, excesiva e injustificada.
MODELO DE PARQUE URBANO DESEABLE Y FUNCIONES DEL ARBOLADO URBANO